Junto a mi esposa Sheyla Palacios les entregamos medallas y reconocimientos, por representar maravillosamente a El Mante.
Donde unos vieron fracaso, nosotros vimos ÉXITO, CONFIANZA, TALENTO, ORGULLO Y DEDICACIÓN.
Y que les quede muy claro, voy a seguir defendiendo a los niños y niñas de El Mante y más cuando se trate de una injusticia.